La húngara Natasa Janics (40.181) se hizo con el triunfo en la final donde la española Teresa Portela (41.273) no pudo meterse en la lucha por las medallas tras la uperioridad de sus rivales y se tuvo que conformar con quinto puesto por detrás de la alemana Reinhardt, la japonesa Kitamoto y la ukraniana Osypenko. La clasificación dio pie al comentario general en la sala de prensa ante la casualidad de que la Teresa Portela portuguesa finalizara en el 7º puesto, justo detrás de la gallega.
Por su parte, el joven palentino Pablo Andrés concluyó en la séptima plaza de la final masculina del K-1 200 metros con un tiempo de 35.659, donde el triunfo fue para el británico Edward McKeever (34.807), que se coronó como campeón del mundo, seguido por el alemán Ronald Rauhe (35.155) y el polaco Pitor Siemionowski (35.195), plata y bronce, respectivamente. También superaron al español el bielorruso Turchyn, el ruso Zavolskiy y el checo Svab.
Completaron la presencia española en finales A sobre la distancia de 200 metros los K-2 masculino y femenino. Al margen de la medalla de plata lograda por Perucho y Craviotto, la pareja formada por Jana Smidakova y Beatriz Manchón finalizaban en sexta posición. Las españolas pararon el crono en 38.074. Aunque está categoría está fuera del programa olímpico la incompatibilidad horaria del K-4 500 y del K-2 500 llevó a las componentes del K-4 a apostar por la distancia corta pero sin excesiva suerte. La asturiana y la andaluza no tuvieron una buena salida, dejándolas retrasadas ante el fuerte inicio de polacas y húngaras, que pugnaban por el título mundial, que finalmente se decantó por el gran final de las húngaras Katalin Kovacs y Natasa Janics (36.886), que minutos antes se había coronado como campeona del mundo en el K-1 sobre esta misma distancia. Por detrás del dúo húngaro concluyeron las polacas Marta Walczykieiwcz y Ewelina Wojnarowska (37.766), que se colgaron la medalla de plata, mientras que el bronce fue para el dúo eslovaco formado por Ivana Kmetova y Martina Kohlova (37.766).
También sobre la distancia de 200 metros, pero en las finales B, el joven talento gallego que superó a David Cal en esta distancia en el control selectivo previo al mundial, André Oliveira, paró el crono en 41.870 finalizando en sexto puesto, en una regata dominada por el polaco Ginter. Mientras que los también canoístas gallegos David Maquieira y Jacobo Domínguez completaban su final B en el octavo lugar con un registro de 40.389, a dos segundos de los brasileños Silva y Ronilson.