Los palistas concentrados, que han conseguido cerrar una temporada de ensueño, ya han empezado su trabajo de cara a 2023 a lo largo de los diferentes puntos de la geografía española.
Será una temporada decisiva para el piragüismo español, ya que durante la próxima campaña se otorgarán las plazas olímpicas de cara a París 2024. En la localidad gallega de Verducido trabaja el equipo de canoístas, dirigidos por Daniel Costa, con intensas sesiones en las que la velocidad se mezcla con la resistencia. De la misma forma trabaja el equipo femenino de kayak, capitaneadas por Teresa Portela y Sara Ouzande. Ambas lideran un grupo de trabajo muy joven y con una gran proyección que buscará volver a clasificar una embarcación de K4 para unos Juegos Olímpicos.
En Sevilla se encuentra concentrada la escuadra liderada por Miguel García, con el K4 campeón del mundo entrenando sobre las aguas del río Guadalquivir. El objetivo será el de llegar al mismo nivel con el que terminaron la temporada de cara al primer selectivo nacional, que se disputará el fin de semana del 14 al 16 de abril de 2023.
Otro de los grandes equipos es el que dirige Kiko Martín en Palma de Mallorca. El C2 masculino campeón del mundo, formado por Tano García y Pablo Martínez, trabaja junto al resto del equipo de canoa en una localización perfecta para su desarrollo. Antía Jácome y María Corbera se encuentran probando la embarcación del C2 para tratar de ser una de las grandes bazas españolas de cara a París 2024.
Por su parte, en Madrid trabaja otra de las grandes selecciones de piragüistas españoles bajo las órdenes de Luis Brasero. En el embalse de Picadas se mezcla el talento de deportistas como Cristian Toro, Paco Cubelos, Íñigo Peña o Isa Contreras; con el potencial de jóvenes kayakistas como Alex Graneri o Marcos Caballero.
La primera competición de la temporada en Aguas Tranquilas será el fin de semana del 17 de marzo en el Campeonato de España de Invierno.
