El futuro del slalom está muy presente

España cierra el Campeonato del Mundo de Slalom Junior y Sub-23 con diez medallas, récord histórico para nuestro equipo gracias a las cinco preseas conseguidas este fin de semana en Kayak Cross. 

Tras una semana repleta de grandes éxitos para la delegación española en el Campeonato del Mundo de Slalom Sub-23 y Junior, el equipo nacional ha disfrutado de una gran jornada de Kayak Cross en Foix (Francia). Este sábado, el protagonismo fue para Anna Simona, que  se coronó campeona del mundo en la prueba individual femenina junior de kayak cross. Con un tiempo de 57.69, superó por solo 28 centésimas a la británica Arina Kontchakov y a la alemana Britta Jung, que compartieron la plata con un tiempo de 57.97. El bronce fue para la también alemana Neele Krech (58.28).

«No sé qué decir, es un momento increíble», confesó Simona. «Me sentí rápida en el recorrido. En la puerta siete me atasqué un poco y no sabía cómo salir, pero lo logré. El apoyo de mis compañeros fue clave. Son la razón por la que estoy aquí.»

La jornada del domingo también trajo grandes alegrías para los nuestros. Oier Díaz se colgó la medalla de plata en la prueba masculina Junior, firmando su cuarta presea en el Mundial y consolidándose como una de las promesas del futuro del equipo español. Díaz se sinceró en los micrófonos de la ICF, declarando que «sabe igual que el oro. Lo mejor es poder compartirlo con mi amigo Faust, que quedó tercero. Nuestro plan era hacer oro y plata, pero Ziga Lin fue muy rápido al principio. Yo tuve un arranque lento, pero pude mantenerme dentro de la línea, y eso era clave.»

Junto a él, Faust Clotet logró el bronce, completando el doblete español en el podio junior masculino. Clotet acumula dos citas medallistas con medallas y sigue un crecimiento arrollador sobre su piragua: «Estoy contento por conseguir una medalla con Oier, pero quiero más. Quiero ganar, aunque hay gente que es muy buena», comentó con ambición el palista español.

En la categoría femenina junior, Ainara Goikoetxea también se colgó el bronce, demostrando su talento en un recorrido muy rápido y complicado. La donostiarra reconoció que «tenía un poco de miedo porque me tocó la peor posición en la rampa y el circuito era difícil con la piedra en el medio, pero pude ir rápido y ahora estoy feliz. Es muy bonito ganar una medalla para España».

Con estas actuaciones, España cierra su participación en el Mundial con un excelente balance y continúa su progresión para tener una cantera de mucha calidad que nutra al equipo senior dentro de poco tiempo.