El K4 español que busca el oro en JJOO ultima la nueva embarcación, con ajustes en reposapiés y asientos

 Montebelo (Portugal), 19 abril de 2021.- La nueva embarcación construida para el K4 español que aspira a proclamarse campeón olímpico en Tokio se ultima estos días en Portugal, donde Craviotto, Walz, Arévalo y Germade la testan en el agua ante el seguimiento del técnico Miguel García, que valora la incorporación de «pequeños detalles en el ajuste de reposapiés y asientos, que van a mejorar la comodidad del deportista para intentar que se exprima a fondo, si bien el diseño del casco es el mismo».

La selección nacional se quedó sin embarcación para competir en los JJOO tras el accidente de tráfico ocurrido hace semanas cuando una racha de viento hizo que se soltara el  remolque que transportaba los barcos, que quedaron dañados encajados en la mediana de la autopista con comunica Asturias y la Meseta. 

– Miguel García desvela «algunas variaciones que están funcionando»

«Ya estamos en la fase final para disponer de la nueva embarcación con la que competirán en Tokio», ha señalado el técnico del K4 500, Miguel García, que ha explicado que el proceso «se alargó un poco más porque aprovechamos para hacer alguna modificación sobre lo que había en la base de la anterior. Hicimos una primera aproximación en Trasona, hasta donde el fabricante se desplazó un par de días, y ya estamos terminando de testar la embarcación casi definitiva. Ahora iremos a la fábrica de Nelo, que está aquí muy cerca de Montebelo, donde haremos los últimos ajustes y en los próximos días acabamos de cerrar el proyecto».

Según ha abundado se trata de «pequeños detalles», centrados en los «ajustes de reposapiés y asientos, que van a mejorar la comodidad del deportista para intentar que se exprima a fondo, si bien el diseño del casco es el mismo».

También trabajan en la «mejora del deslizamiento del barco pensando en la distribución de los pesos», teniendo en cuenta los deportistas que la integran, ha agregado Miguel García, consciente de que «ahora ya queda poco tiempo, no es posible hacer cambios extraordinarios», aunque desvela que han introducido «algunas variaciones que están funcionando».

En definitiva, se trata de «pequeños detalles» que en otras ocasiones no habían sido capaces de perfilar y que la fatalidad del accidente les ha dado la «posibilidad a última hora de retocar algunos aspectos», ha señalado el entrenador, ganador de 4 medallas olímpicas como técnico en Pekín 2008, Londres 2012 y Río 2016.

«Para nosotros es una ilusión importante estar desarrollando una embarcación de cara a los JJOO, además el fabricante está muy ilusionando e implicado», ha concluido Miguel García, satisfecho por el comportamiento de la embarcación en el test realizado ante un  «rival exigente» como la selección lusa.

– Craviotto se siente «muy cómodo y entrenando muy bien»

El catalán Saúl Craviotto ha explicado que el molde de la embarcación es «muy parecido al anterior, yendo muy cómodos. Estamos ultimando sobre las posiciones, la diferencia de peso, la longitud de piernas, a estos niveles tenemos que ir al detalle».

El cuádruple medallista olímpico, ganador de puesto de podio en K1 y en K2, y aspirante a lograrlo en K4 en Tokio como marca -primer ocupante- de la embarcación española, ha confesado sentirse «muy cómodo, y entrenando muy bien» con el barco nuevo.

«Estamos muy centrados en los JJOO para los que quedan ya menos de 100 días y nos encontramos muy ilusionados y con muchas ganas», ha señalado Craviotto, que se perfila como abanderado de la delegación española para la ceremonia inaugural.

– Walz, «pinta muy bien»

El balear Marcus Cooper Walz ha asegurado que su primera impresión al probar la embarcación ha sido «bastante buena», si bien ha reconocido que tenía un «poco de miedo por si la fábrica ha haría exactamente igual» y también si se acostumbrarían rápido, tanto mental como físicamente, porque son muchos detalles que cuidar. La conclusión es que genial».

«Le habíamos cogido mucho cariño anterior, es una pena que se estropeara, aunque con la nueva estamos muy contentos desde el principio, y muy adaptados; pinta muy bien».

Respecto a las sesiones de entrenamiento que comparten con la selección portuguesa, Walz se muestra «encantado de poder entrenar con un barco duro, de buen nivel con el que los españoles se llevan «muy bien personalmente; es un gusto entrenar con ellos, parece que sacamos un extra de calidad».

Walz, campeón olímpico en K1 1.000 en Río 2016, ha cambiado su posición en la embarcación, adelantando su puesto del tercero al segundo: «Fue idea del entrenador y vamos mejor. Empezamos a probar por temas técnicos y la manera de palear, nos convenció ya desde el principio».

– Arévalo, «noto que vamos más enganchados»

El gallego Carlos Arévalo ha destacado la mejoría en el deslizamiento entre las sensaciones que le deja el K4: «noto un pequeño cambio, sobre todo al arrancar, que vamos más enganchados».

Ha enfatizado: «Corre muy bien, vamos muy cómodos», y ha agregado: «El barco responde muy bien, nos deja sensaciones magníficas, en especial en el deslizamiento que se nota después de la salida y en el momento en el que hay coger máximo pico de velocidad. A la embarcación solo queda la pintura, le falta ponerle  los colores de España y llevar esos colores  a lo más más alto».

En alusión a la permuta de posición con Walz, Arévalo -actual subcampeón mundial de K4 500- ha sido tajante: «Me encuentro genial. El técnico ha valorado que mi mejor sitio es el 3, no he notado diferencia, y me ha adaptado muy rápido».

– Germade, «le cuesta menos arrancar»

El también gallego Rodrigo Germade ha dicho que, tras varias sesiones de entrenamiento con la nueva embarcación construida para competir en los JJOO, percibe la sensación de que a este barco «le cuesta menos arrancar».

El palista, diploma olímpico en Río 2016 en K4 1.000, entiende que la embarcación que están perfilando se encuentra en un estado «bastante ajustada» y que «se han notado» todos los estudios realizados para obtener el mejor resultado, ya que los pesos están «más equilibrados».

«Lo que le falta ahora a la embarcación es más en el sentido estético, porque el resto está bastante pulido ya», ha resumido el palista de Cangas de Morrazo, que ocupa la cuarta posición en la tripulación.