El primer día de selectivo nacional en el Embalse de Pontillón de Castro, ha dejado a tres barcos en los que ya se podrán poner los nombres definitivos en los cascos de los mismos y que estarán en la lista de salida de su prueba en los Juegos Olímpicos de París. Los dos primeros nombres en conocerse fueron los de María Corbera y Antía Jácome, que en el C2 500 se impusieron con cierta claridad y confirmaron su favoritismo en la prueba. Las sub campeonas del mundo en Duisburgo ya tienen billete olímpico, para Antía será su segunda vez después de competir en Tokyo 2020, mientras que para la madrileña María Corbera esta victoria le lleva a culminar con su sueño olímpico.
Los siguientes sobre la lámina de agua de Pontillón de Castro fueron los hombres del C2 500. Una final que deparó una sorpresa ya que no fueron los actuales terceros del mundo, Pablo Martínez y Cayetano García los vencedores, si no la pareja formada por Joan Antoni Moreno y Diego Domínguez los que consiguieron vencer y, de este modo, llevar la decisión de quién competirá en los Juegos en esta categoría hasta la Copa del Mundo de Szeged (Hungría) de la segunda semana de mayo. Pablo y ‘Tano’, solo con ganar, tenían su plaza asegurada, pero no se les vio bien en ningún momento y concluyeron la prueba en la cuarta posición. Segundos fueron Adrian Sieiro y Manuel Fontán y en tercer lugar finalizaron Pablo Crespo y Martín Jácome. De este modo, tendremos que esperar tres semanas para ver quien consigue estar en los Juegos.
Por último, fue el turno de los barcos K4 500. En la categoría femenina no hubo ningún tipo de sorpresa y el barco de Sara Ouzande, Estefanía Fernández, Carolina García y Teresa Portela, se impuso con claridad (casi un barco de ventaja) a la otra embarcación en liza, formada por Lucía Val, Barbara Pardo, Nerea García y Carla Corral.
Tampoco hubo ningún tipo de sorpresa en el K4 500 masculino, donde Saúl Craviotto, Carlos Arévalo, Marcus Cooper y Rodrigo Germade, llegaron a meta casi un segundo antes que las demás embarcaciones, que en esta final estaba compuesta por tres embarcaciones más y fue la de Alex Graneri, Lázaro López, Pelayo Roza y Carlos García los que lucharon hasta los últimos instantes de la final por poner en aprietos a los subcampeones olímpicos, pero en los últimos 50 metros consiguieron imponer su superioridad.