La catalana del Cadi de la Seu d´Urgell, Nuria Vilarrubla, logró la única medalla para España en la tercera jornada de los Campeonatos de Europa que se están disputando en el río Vrbas en Banja Luka (Bosnia). La medalla de la catalana tiene la peculiaridad de ser la primera, y seguramente la única, que haya ganado un piragüista español de slalom compitiendo por la noche. La maratoniana jornada disputada ayer, marcada por un absurdo programa en el que deporte y deportistas quedaban de lado para dejar paso al espectáculo, tuvo al menos un final feliz. Nuria Vilarrubla lograba su primera medalla internacional y una importantísima medalla para el Slalom español. También con los focos iluminando el campo de slalom y mitigando la oscuridad de la noche lucharon por las medallas en las finales de la categoría sub 23: Marta Martínez, que finalizó sexta en K-1, y Daniel Marzo y Jesús Pérez en C-2, a los que un injusto 50 en la puerta 19 les relegó al noveno puesto.
Nuria lograba el pase a la final con el tercer mejor crono y en la final con un crono de 137.94 se veía relegada al tercer puesto, por un supuesto toque en la puerta 20 que sólo un juez de los tres encargados de esa puerta vio. Ante la reclamación española esa penalización fue retirada y Nuria Vilarrubla se proclamaba subcampeona de Europa relegando a la tercera plaza a la británica Spencer, a un segundo de la española, y con victoria de la francesa Rebours, con tres segundos menos que Nuria en el total. Al finalizar la carrera Nuria visiblemente emocionada comentaba «Estoy muy contenta. Nadie se imagina por lo que he pasado esta semana”. Desde su llegada a Bosnia graves problemas respiratorios dejaron muy mermada a la palista del Cadi que ha podido recuperarse para lograr esta medalla para España.
La categoría sub 23 fue la protagonista de la sesión vespertina y nocturna. En las semifinales disputadas por la tarde se quedaban eliminados Alberto Díez Canedo en K-1, incapaz de mejorar su posición y finalizando estos europeos en el 21º puesto con un total de 104.91 a seis segundos de la final. Tampoco pudo mejorar David Pérez en C-1 finalizando de nuevo en el 19º puesto con un total de 111.03 a tres segundos de los 10 mejores. En K-1 Sub 23 femenino España la catalana Marta Martínez lograba con más apuros de los previstos su clasificación con el 9º mejor crono, mientras Nuria Vilarrubla se quedaba apeada de la final en el 17º puesto, a cinco segundos de la manga definitiva. También lograba el pase a la final la C-2 de Daniel Marzo y Jesús Pérez que una brillante carrera se clasificaban con el 6º mejor crono, a sólo un segundo de los puestos de pódium.
En las finales sin embargo ni el C-2 ni Marta Martínez lograban meterse en el pódium. Marta tenía que conformarse con el sexto puesto con un crono de 109.04, pero con una penalización de 2” que la relegó del cuarto al sexto puesto final. La victoria fue para la eslovena Tercelj (107.63) por delante de la italiana Giai-Pront (107.91) y la medalla de bronce para la alemana Funk (108.58). Por su parte la C-2 española se veía castigada con una injusta penalización de 50 segundos en la puerta 19, después de haber parado el crono en 114.73, el sexto mejor, y se veía relegada a la 9ª posición final. La victoria fue para el C-2 de Eslovenia seguido de la Republica Checa y Alemania.
En la matinal de la jornada de ayer los júnior no tuvieron suerte en las semifinales.
A la buena actuación de nuestros júnior en las series clasificatorias les faltó el premio de las finales. La mejor fue la palista del Atlético San Sebastián Nerea Fernández, a la que una incomprensible decisión arbitral le arrebataba la 10ª plaza en la semifinal de C-1, 40 minutos después de finalizada la carrera, y cuando donostiarra y técnicos preparaban la final. Al 11º primer puesto de Nerea en C-1 hay que sumar su 15º puesto en K-1. En esa misma categoría la gallega Antía Loira, que partía con el 17º mejor tiempo, realizaba una gran primera parte del recorrido que parecía abrirle las puertas de la final pero un error en la trayectoria de la puerta 16 a la 17 le penalizó con un 50 que le apartó de toda opción. Misma suerte corrió el kayakista donostiarra Xabier Jáuregui, que partía con el 10º mejor tiempo, y que fue penalizado con riguroso 50 en la puerta 12, dejándolo fuera de la competición. Completaba la participación española en categoría júnior el también gallego Mario Fontán que no pudo mejorar su resultados de las series y finalizó en el 13º puesto de la semifinal de C-1 júnior, a menos de tres segundos de la final.
La patrulla K-1 júnior a las puertas de las medallas
En la matinal de hoy la patrulla K-1 júnior afrontaba la última opción de medalla de España en estos europeos. El equipo formado por el donostiarra Xabier Jáuregui, el catalán Bernat Lavaquiol y el irundarra Telmo Olazabal completaron un recorrido perfecto, sin penalización alguna y con un buen tiempo que les permitió apurar sus opciones de medalla hasta el final. Los españoles llegaba a la final con el 6º mejor crono y aunque mejoraron su total con 112.68 y se situaron primeros y vieron como ni Republica Checa ni Rusia, que les habían superado en semifinales podían con ellos, los tres mejores en semifinales no fallaron y relegaron al cuarto puesto a los españoles. La victoria para Eslovenia con un total de 107.01, seguida de Polonia 110.41 y la medalla de bronce para Alemania con 110.89.
Esta tarde se clausura este peculiar Campeonato de Europa con la entrega de medallas
Esta tarde se pone el broche final al Campeonato de Europa con la entrega de medallas. Un Campeonato con una organización realmente anárquica y difícil de asimilar que la delegación española ha sabido sin embargo afrontar y superar logrando unos buenos resultados. A los problemas de logística y de la falta de los medios necesarios para afrontar en plenas condiciones una competición de este nivel, sin las dotaciones mínimas para los equipos y mucho menos para los medios de comunicación con los que evidentemente no contaban, o a los inconvenientes de afrontar una competición por la noche después de completar una jornada ininterrumpida de 16 horas, hay que añadir como nota más negativa las modificaciones sin rigor del programa establecido. Es muy difícil de asumir para palistas tan jóvenes y con poca experiencia internacional que al finalizar la jornada del viernes la organización les informe que en lugar de disputar sus semifinales el domingo lo harán tan sólo 12 horas después, un desatino que nunca había ocurrido antes en una cita internacional de este nivel, sin razones de extraordinarias que lo justificasen, muy difícil de asimilar y que seguramente nunca más se repetirá. En cuestión de horas el programa del sábado se convertía en un día imposible en el que se disputaron 10 semifinales (182 salidas) y 10 finales (96 salidas), lo nunca visto en una competición internacional de Slalom. Menos mal que la tecnología no falló.